El sentido de la vida es arriesgarse

 

El sentido de la vida es arriesgarse a cumplir sueños que para la mayoría parece una locura pero que para ti son el destino.

A veces, podemos estancarnos en un entorno por comodidad o miedo. Sin embargo, no hay nada más aterrador que permanecer en un lugar donde no te quieren, donde no te valoran, y donde tu presencia no se reconoce como un tesoro invaluable. 

Los nuevos comienzos son como abrir un cofre del tesoro lleno de potencial, donde la magia del renacer, el crecimiento y el cambio está a la orden del día. Son la puerta secreta para dejar el pasado atrás y saludar a un futuro cargado de aventuras y sueños por cumplir. 

Aunque estos arranques pueden ser una montaña rusa de emociones, siempre traen la oportunidad de aprender, evolucionar y descubrir al nuevo tú que está listo para salir a escena.

Debemos ser guerreros valientes, dispuestos a luchar por lo que realmente merecemos. Todos sabemos que merecemos felicidad y, sobre todo, el respeto y la valoración, derechos por los que debemos luchar. Constantemente tomamos decisiones, ya sea al actuar o al abstenernos de hacerlo; siempre estamos eligiendo.

Nunca elijas quedarte estancado como un barco a la deriva en el mar. Si permaneces así, te marchitarás con el tiempo.

A menudo, la falta de decisiones importantes puede reflejar una carencia de amor propio, ya que no hay nada que fortalezca más el espíritu que el amor hacia uno mismo. 

"La fortuna sonríe a los valientes"

Este amor despierta una llama en nuestro corazón que nos guía hacia una vida mejor. No temas tomar decisiones significativas, pues detrás de ese miedo puede ocultarse tu verdadera felicidad.No la hagas esperar mas y lánzate a tomar lo que te mereces. No dudes de como iran las cosas porque todo irá como tiene que ser.

Eres una persona valiosa y no debes dudarlo ni por un segundo; no te niegues la oportunidad de ser feliz en un lugar que te haga sentir pleno. No te conformes con una vida que no te satisface; conviértete en un guerrero aventurero, dispuesto a conquistar tu propia felicidad.

No se requieren grandes esfuerzos, solo es necesario dar el primer paso y luego las cosas fluirán. Si algo está destinado a ser, se moverá sin esfuerzo; pero primero, debes tomar la llave de esa puerta y decidir abrirla para permitir la llegada de nuevas oportunidades.

Decide hoy dejar atrás lo viejo y tener la valentía de dar la bienvenida a lo nuevo. La vida está compuesta de ciclos que se cierran y se abren, cada uno con su propia magia. Al cerrar un ciclo, debemos hacerlo con gracia y gratitud, reconociendo todo lo aprendido en el camino.

No mires atrás con amargura, sino con agradecimiento por todo lo que has aprendido y que te ha convertido en una mejor persona. 

Es hora de emocionarte por el siguiente paso, que te llevará hacia un cambio positivo en tu desarrollo personal y espiritual. Avanza con confianza, sabiendo que todos los cambios que se presenten en tu vida están destinados a beneficiarte.

Más adelante, podrás mirar atrás y darte cuenta de que todo sucedió para tu mayor bien. Mientras tanto, confía en el proceso y mantén la fe de que todo saldrá bien. 

Necesito que confíes en ti mismo y no dudes ni por un instante de que todo sucede para tu mayor beneficio.

No adoptes una actitud de víctima; mantén el enfoque en la victoria, pues cada decisión que tomes y cada cambio que ocurra en tu vida te llevarán hacia el éxito. Si en tu mente persiste el temor a los cambios, comienza a sustituirlo por la aceptación amorosa de los mismos.

Dale un enfoque positivo a esa decisión que te consume con miedo, y conviértela en amor, aceptando que todo cambio es para tu bienestar. Declara en tu mente: "Acepto con amor los cambios que llegan a mi vida".

No permitas que tu mente te domine; tú debes dominarla de manera consciente. Mantén un diálogo positivo contigo mismo y, si surgen pensamientos negativos, transformarlo en positivos, enfocando tu atención en las ideas constructivas. 

Esto te proporcionará energía positiva, de la cual te nutrirás, notando que te sientes más enérgico y entusiasta. En los pensamientos positivos reside la energía pura y divina que nutre nuestra alma.

Sostén esa idea positiva a lo largo del día y verás cómo se manifiesta la magia que hay en ti.

María G.