“Eres visto, la gente está mirando y escuchando y apreciando lo que estás haciendo. Tu lucha tendrá su recompensa. Sigue moliendo. Sigue siendo auténtico. Sigue diciendo tu verdad. No te rindas, porque no has terminado.”
Ahora que me he decido de compartir mi historia
públicamente me siento feliz, contenta y aliviada de hacer algo que pueda tener
un propósito mayor para mejorar y ayudar a las personas y eso no puede darme más que sensaciones
positivas de alegría y de esperanza de formar parte del cambio que necesita
este planeta y tener la oportunidad de poner mi granito de arena. Esto solo me
puede llenar de orgullo y satisfacción.
Me ha costado salir de la cueva en la que me encontraba donde se me había hecho difícil imaginar y aceptar que parte de mi vida fuera pública además de que era una persona tímida no me imaginaba hablando delante de una cámara exponiendo mi verdad, pero todo eso cambio de repente cuando sientes esa voz interior y ese llamado que te dice que es el momento de hacerlo no lo piensas dos veces y das el paso hacia adelante.
Si pensara que me muero mañana me gustaría ser
recordada como alguien que aportó algo a la sociedad y que pueda ser de
utilidad para los demás.
He sacado una fuerza y una valentía interior que
desconocía pero creo que la fe y el amor tiene mucho protagonismo en esta nueva
María que está despertando y saliendo a la luz y mostrando con fe y valentía su
verdad.
Seguiré hacia adelante hasta que Dios me diga
que me detenga por que de ahora en adelante solo Dios podrá detenerme.
La fe y el amor que siento por él me dan el valor y la
motivación para hacer esto con un propósito y una demostración de amor hacia
ese que me creó y que hoy puedo dar gracias de que soy lo que soy por todo lo
que Dios me mostró y me enseñó a través de mi dolor.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario