La falta de empatía en el entorno familiar

 

Todos alguna vez nos hemos sentido dejados de lado y no escuchado por los seres más cercanos y esto puede causar mucho dolor. De la familia se espera siempre lo mejor porque son los seres que te aman y por ese amor te demostrarán su apoyo incondicional pero el problema es que no siempre es así.

A veces las palabras que queremos escuchar de esos seres queridos nunca son escuchadas y muchas veces se quedan en el terrible silencio que lo hace aún peor sin saber que decirte o quizas eligen minimizar las cosas para lavarse las manos.

Con todas las experiencias que he vivido aprendí que esto no es un motivo para sentirme mal o triste porque entiendo que cada quien tiene un nivel de conciencia distinto y no puedo esperar que ellos me den lo que no tienen.

Si algunos de mis familiares no han desarrollado la empatía yo no le puedo pedir empatía porque carecen de ella.

Pero sí es considerado tomar decisiones y no seguir perdiendo el tiempo mandando audios a tus familiares para luego darte cuenta que no son escuchados.

Es mejor aceptar la realidad con valentía y fortaleza entendiendo que esos familiares no tienen para darme lo que yo quiero y lo que yo necesito y deseo en ese momento y simplemente decidir apartarme y seguir con mi viaje sin llevar cargas innecesarias de  resentimientos y dolores.

El viaje aún es muy largo y si me lleno de maletas no podré seguir avanzando debo ir dejando todas esas maletas innecesarias que no me sirven para poder continuar ligera hacia el viaje que aún me toca recorrer.

El viaje de la vida está lleno de aventuras dulces y amargas y hay que saber llevarlas.

El amor y la atención no se ruega porque eso te nace y lo das sin que te lo pidan.

Lo importante es que las acciones de otras personas no se conviertan en una condena para ti mismo y entiendas que cada persona tiene un nivel de conciencia distinto y eso hay que respetarlo.

Si tienes plena conciencia de que cada persona actúa en base a su nivel de conciencia dejarás de tomarte las cosas de manera personal.

En estos casos el sufrimiento es innecesario y no debes dejarte arrastrar por un sufrimiento que se puede convertir en resentimiento ya que es una energía de baja vibración.

Si tienes algún familiar que te ha desilusionado acepta con amor que ese ser querido está en un nivel de conciencia distinto al tuyo y no debes permitir que su comportamiento  te afecte emotiva y energéticamente.

 

Liberarte de la suegra

Momentos difíciles los tenemos todos y quién nos se ha llevado mal con la suegra pero al punto de que ella quiera terminar con tu vida puede ser algo realmente exagerado y que no le toca a  cualquiera tener que vivir pero a mí me tocó vivirlo.

 Puede dejarte un sabor de boca amargo pero a partir de allí decides tú lo que quieres hacer con ella, si quieres seguir con el sabor de boca amargo o simplemente tomarte una buena cucharada de miel.

Todo esto fue causante de las largas discusiones que tenía con su hijo por sus problemas de alcohol ya que él me insultaba y hasta me maltratada físicamente y psicológicamente cuando estaba bajo las influencias del alcohol.

Mi suegra era mi vecina así que en cada discusión ella hacía su intervención y como naturalmente hace en cualquier madre obviamente estaba defendiendo a su hijo pues las madres aunque si ven a un hijo maltratar cruelmente a una persona la madre tratará siempre de defender al hijo.

Personalmente me parece una manera muy cruel de amar a un hijo porque el hecho de amar a un hijo no justifica que tengas que aceptar su crueldad hacia otra persona pero el tipo de amor que sentía mi suegra por su hijo era de ese tipo.

Era un amor tóxico egoísta como tantos suelen amar a sus hijos sin darse cuenta que le están destruyendo la vida y al final le va a tocar ver a sus hijos solos porque nadie puede soportar su toxicidad y maldad.

En una de aquellas discusiones mi suegra me amenazó de muerte. En aquel momento tuve que llamar la policía porque realmente pensé que podía hacerme algo pero al final por suerte pude salir con vida de aquella familia donde no solo me amenazó de muerte su madre sino también su padre amenazó junto golpearme.

Hoy me siento aquí a escribir esta historia porque quiero compartir mi sentir sobre todo lo que sucedió y cómo esta familia me trató y me humilló porque también su hermana me tiro una vez basura.

Ahora puedo tranquilamente reflexionar sobre todo lo que me sucedió con esta familia y puedo decir que a través de esta familia mi tolerancia y mi perdón fue puesto a prueba.

A través de estas situaciones negativas pude poner en práctica uno de los dones más hermosos que puede poseer un ser humano y es aplicar el amor y el perdón en cada situación de tu vida.

Hoy veo todo lo sucedido con otros ojos entendiendo que todo lo que sucedió fue para mi mayor bien y mi crecimiento espiritual donde se me dio la oportunidad de perdonar y que aquella situación fue una situación de prueba para que yo demostrara mi capacidad de perdón.

Hoy solo puedo puedo ver aquella situación como una oportunidad para poner en práctica la ley universal del amor porque solamente a través del amor tú puedes ofrecer un perdón.

Cuando ofreces un perdón  estás demostrando tu grandeza como como ser humano sin asumir la actitud de juzgar o mantener una actitud de víctima porque el victimismo no te permite ver la situación desde un lugar más elevado en amor y perdón.

A pesar de las palabras duras dichas por parte de aquella familia hoy puedo decir que no llevo ningún tipo de rencor y siento felicidad en poder hacer algo por ellos que les genere felicidad porque su felicidad también me genera felicidad y es allí donde te das cuenta de que no lleva ningún tipo de rencor sobre aquellos que te dañaron, te ofendieron, te atacaron, te humillaron y te difamaron.

Recuerda que  las situaciones más difíciles son tus mejores maestros y es donde más aprendes y creces espiritualmente, acoge con amor y sabiduría cada estación difícil que estés enfrentando en este momento y simplemente aprende de ellos y sigue adelante y suelta el control de juzgar y simplemente abandónate a las leyes del amor universal.